Los más peques inician sus aventuras escolares en Alemania con un cucurucho bajo el brazo. Y así con su Schultüte cargada de regalitos asistirán a su primer día de colegio.
Esta interesante tradición se remonta al siglo XIX y comenzó en Turingia y Sajonia para, a principios del siglo XX, extenderse al resto del país.

Berlín, años 30 (IMAGNO/Austrian Archives)
Habrá quien los compre hechos, habrá quien durante semanas ejercite sus habilidades y dotes en manualidades para construirlo… y habrá quien se decante por la variante entre una y otra y se haga con uno de los sets preparados de manualidades de la marca Rico. Esta opción es sencilla ya que viene con materiales e instrucciones para conseguir una bonita Schultüte.

Y, ¿cómo rellenamos este cucurucho? Aquí hay una pequeña lista con ideas:

- Botella o fiambrera personalizada. En simplycolors.de se puede encargar todo lo necesario para el cole y darle un toque personal con un dibujo y el nombre del niño/a.
- Rotuladores mágicos. Estos no forman parte del material escolar requerido pero son super divertidos. Se trata de rotuladores a los que al pasarles el rotulador «mágico» blanco, cambiarán de color.
- FlikFlak. Estos relojes son perfectos para aprender la hora y pueden ser un bonito regalo de los abuelos. Se puede personalizar la correa y añadir el nombre o, por ejemplo, un número de teléfono.
- Letras que se transforman en robots. Abecedario transformable en pequeños robots. También existe la misma idea con números. A mi hijo, aunque ya hayan pasado unos años desde su Einschulung, todavía le encanta jugar con ellas.

- Juego de dados. Este juego de dados matemáticos a partir de 6 años es una buena opción para practicar operaciones matemáticas sencillas. Hay otro para niños más mayores.
- Dobble. Juego muy popular y divertido. Si ya tienen la edición clásica, hay muchas variantes, como por ejemplo de los Minions o de Harry Potter. Éxito garantizado.
- Uno. Este juego clásico no falla nunca. Si no lo tienen todavía, lo disfrutarán mucho en esta nueva etapa que inician.
- Blokus de viaje. Para que quepa en la Schultüte, este tamaño de viaje para dos jugadores es perfecto. El juego es a partir de 7 años pero mi hijo empezó mucho antes a jugar con él. Juego de estrategia sencillo que cuenta sólo con una regla: conecta las fichas de tu color, tocando sólo una esquina. El jugador que al final tenga menos fichas (se cuentan los cuadraditos de las fichas), gana.